Camacol presenta sus propuestas sectoriales para el próximo gobierno
⮚ Hacer de Colombia un país sin déficit habitacional; reducir la pobreza mediante el acceso a la vivienda formal en entornos urbanos y rurales; construir ciudades de calidad, e impulsar la productividad, la sostenibilidad, y el bienestar de los trabajadores, son los grandes objetivos de las propuestas que Camacol estructuró para el próximo gobierno.
⮚ El principal reto en vivienda consiste en superar el déficit habitacional y proveer vivienda formal para los 1,6 millones de nuevos hogares que se formarán en los años 2022 – 2026, y para este desafío existen unas dimensiones en las cuales se debe avanzar en la política y el entorno sectorial.
Bogotá, 9 de junio de 2022
Este es un año trascendental para la democracia, la sociedad, las regiones, el tejido empresarial y el sector. Por eso, las propuestas sectoriales que debe tener en cuenta el nuevo Gobierno Nacional para mantener la dinámica de la actividad edificadora y seguir cumpliendo el sueño de millones de colombianos de acceder a una vivienda propia y formal en ciudades y regiones de calidad, es una prioridad.
“En los últimos años la actividad edificadora ha tenido un cambio positivo de escala y se ha convertido en un pilar fundamental para la reactivación económica y la generación de empleo en el país” dice la presidenta de Camacol, Sandra Forero Ramírez, quien también afirma que, “la vivienda es uno de los componentes centrales del bienestar y el progreso social de los hogares; además, representa el activo más importante de las familias. Por otro lado, la vivienda formal tiene características ideales para la superación de la pobreza, la solución del déficit habitacional, y el desarrollo urbano formal”.
Adicionalmente, la construcción genera 1,6 millones de empleos directos y 2,7 millones de empleos indirectos eso es uno de cada cinco empleos del país. Asimismo, la inversión anual en vivienda nueva representa 5 puntos porcentuales del PIB, es decir 1 de cada 5 pesos de inversión en la economía. También, la construcción de vivienda nueva demanda insumos y servicios del 54% del aparato productivo del país y con la construcción de vivienda formal se supera el 33% de los problemas de la pobreza multidimensional (agua, saneamiento, pisos, paredes, hacinamiento).
Por tal razón, es fundamental garantizar el acceso a la vivienda formal en Colombia para ser un país sin déficit habitacional cuantitativo, ya que además de ser un avance social sin precedentes, soluciona gran parte de la pobreza del país. Y en ese sentido, Camacol estructuró 15 acciones que permitirán hacer de Colombia un país sin déficit habitacional y reducir la pobreza mediante el acceso a la vivienda formal en los entornos urbanos y rurales; construir ciudades de calidad en las que se garantice la oferta social del Estado, la creación de tejido comunitario y la seguridad jurídica en el ordenamiento territorial; e impulsar la productividad, la sostenibilidad, el bienestar de los trabajadores y ampliar la frontera de inversión del sector.
Dentro del primer grupo de acciones están: garantizar el acceso a la Vivienda de Interés Social (VIS) urbana para 100.000 familias por año a través del programa Mi Casa Ya; crear el programa de Arrendamiento Social dirigido a hogares con ingresos inferiores a 1,5 smmlv; desarrollar un Plan Nacional de Equipamientos Sociales para construir 1 millón de metros cuadrados por año en colegios, centros infantiles, espacios deportivos y recreativos, puntos digitales, entre otros; crear el programa de Vivienda Rural Integral para atender la necesidad de vivienda e infraestructura social de las comunidades campesinas en núcleos rurales; fortalecer la inclusión financiera y el acceso al crédito para hogares de menores ingresos formales e informales mediante el programa Ahorro para Vivienda – Futuro Garantizado; y promover un programa de Mejoramiento de Viviendas y Barrios que contemple inversiones públicas en equipamientos e infraestructura, y subsidios y créditos de bajo monto para reparaciones y adecuaciones locativas.
Asimismo, para mejorar el entorno de inversión del sector se requiere impulsar el proceso de actualización de los Planes de Ordenamiento Territorial mediante la consolidación de la información territorial y el desarrollo de los estudios técnicos necesarios; crear el Sistema Nacional de Gestión de Suelo Urbano como plataforma de publicidad, veeduría, seguimiento y transparencia procedimental en la gestión de suelo; crear el Fondo de Proyectos de Renovación Urbana de Interés Nacional, y a través de la Agencia Nacional Inmobiliaria, gerenciar la estructuración, financiación y gestión predial para el desarrollo y ejecución de los proyectos; impulsar la Exportación de Vivienda como estrategia para ampliar la oferta exportable del país y canalizar inversión extranjera y de remesas hacia el desarrollo inmobiliario formal de las regiones, y crear el marco legal y procedimental para impulsar el Arrendamiento Especializado en Colombia, y así acelerar el desarrollo de proyectos exclusivos para la renta orientados a la prestación de servicios habitacionales en segmentos de multifamiliares, estudiantiles, vivienda asistida, entre otros.
Y como pilar de la visión de la construcción de vivienda en Colombia se requiere que la sostenibilidad y formación estén como prioridades. Para eso se necesita implementar el Plan de Formación para Trabajadores de la Construcción, a través del Fondo de la Industria de la Construcción y en línea con el Catálogo de Cualificaciones del Sector; impulsar la Acción Climática y la Construcción Sostenible mediante subsidios a los hogares y beneficios urbanísticos/tributarios para proyectos certificados; acelerar el proceso de adopción de la metodología BIM (Modelado de Información para la Construcción) mediante el desarrollo de incentivos para el acceso a software, formación y acompañamiento técnico a las empresas del sector; y crear una estrategia de Fortalecimiento Institucional y Virtualización para la cadena de trámites y procedimientos en las fases de urbanismo, construcción y venta de inmuebles; con particular énfasis en los trámites registrales.